Mi niña no sabe jugar (y yo tampoco)

Hace una semana estuve en un encuentro/retiro LGBTIQA+ en Cataluña, y una de las dinámicas de uno de los talleres me conectó mucho con mi niña interior. La vi en el suelo, protegiéndose con los manos enzima de su cabeza. Estuvo llorando, y mi sensación inicial era que estuvo llorando por miedo a jugar, o por miedo a que la van a forzar a jugar. Fue el último taller del día, y después de la cena me retiré pronto a la habitación que compartí con tres amigues – nuestro espacio seguro – y conecté con mi niña, a la que encontré otra vez llorando. Llorando fuerte, y con mucha emoción, que inicialmente pensaba era miedo.

Tarde un día más para entender que no era tanto miedo, sino más bien vergüenza. Mi niña siente vergüenza por que no sabe jugar. Y tiene miedo que la fuercen a jugar y todo el mundo se da cuenta que no sabe jugar.

Me recordaba de un articulo que escribí hace dos meses sobre “mi infancia feliz”, y sobre las consecuencias de la negligencia en mi infancia, una negligencia que empezaba con el nacimiento de mi hermana cuando tenía 1½ años. Hice referencia a un articulo sobre el Trastorno reactivo del apego (en inglés) en el que se dice sobre algunas de las síntomas:

• “El niño no juega con los juguetes ni participa en juegos interactivos con los demás.

• El niño es muy retraído y no se relaciona con otros niños o adultos.”

Es así. Mi niña no sabe jugar. Nunca ha aprendido jugar, nunca ha aprendido relacionarse con otres niñes. Y, hasta ahora, yo no sé jugar, no sé como relacionarme con niñes. Me siento insegure con niñes, y me entra el miedo, y me bloqueo.

En la última sesión con mi terapeuta hablamos de que me falta jugar, que me falta hacer cosas lúdicas. Y, es cierto. Pero en esto momento no entendí realmente la raíz del problema. Sí, tengo ciertos bloqueos a exponerme de esta manera, pero no pensaba en que ni de niña sabía jugar.

Intentando recordarme de mi infancia – a partir de los 10 años, como no tengo ningunos recuerdos de antes – es cierto que no tengo recuerdos de jugar con otres niñes. Mi espacio era mi maqueta de trenes, y, quizás, menos para jugar, más bien para escapar a mi mundo de fantasía. Y, en lo general lo hice sola.

Dibujo de mi niña interior, 16 de octubre de 2022

Hace pocos días una amiga mía dio luz a su bebe. Mientras me alegra que esta feliz, al mismo tiempo esto me conecta con el inicio de mi trauma complejo, el inicio del abandono y de la negligencia emocional, que esta a la raíz de que mi niña no sabe jugar. Hoy, mi niña volvió a dibujar, y, aunque tenía solo 1½ años cuando nació mi hermana, los miedos y recuerdos de mi niña son del abandono porque hay otra niña (y niña, mientras a mi niña la llamaron niño y la forzaron de ser niño). Y me siento muy conectade con el abandono, con las emociones de mi niña. Esta mañana, todavía en la cama, tuve que llorar, y conectando con mi niña, la encontré llorando fuertemente. Conseguí calmarla, hablando con ella y diciéndole que no esta sola, que estoy a su lado, que nunca la voy a abandonar, que el abandono es el pasado, pero que ahora estoy yo.

Estoy consciente de que he perdido amistades importantes para mi por el nacimiento de une hije. Entonces, no entendía que me estaba pasando, y instintivamente me retiré. Ahora, creo que, entiendo mejor que me esta pasando, y aunque necesito distancia, necesito gestionar las emociones y miedos que se disparan a raíz del nacimiento de la hija de mi amiga, estoy al menos consciente de lo que me esta pasando, y puedo gestionarlo de otra manera, cuidando a nuestra relación y también cuidando a mi niña, que se siente asustada y con miedo. Y, quizás, esto también ayuda a que mi niña y yo podemos aprender jugar.