Mi niñe interior y yo (IV)

Desde qué he reconectado con mi níne interior, intento conectar con elle una o dos veces al día, usualmente por la noche ya en la cama, y por la mañana todavía en la cama, antes de levantarme. Lo veo un ejercicio para conocernos mejor, profundizar la confianza, y sanar a mi niñe interior. Es un tipo de visualización de mi niñe interior, aunque quizás no tan estructurada como por ejemplo en esta visualización. Entiendo que para algunas personas que leen a mi blog les parece raro visualizar a mi niñe interior de esta manera, y hablar de mi niñe en tercera persona, poder tocarle, abrazarle. A mí no me parece nada raro, sino simplemente una manera de visualizar o imaginarme a mi niñe interior.

Hace dos noche, ya en la cama conecté algo con mi niñe interior. Estaba otra vez sentade en su esquina, pero sin taparse los ojos. Me permitió sentarme as su lado, pero sin tocarle.

Mi niñe interior siguió sin hablarme, solo indicó un 'sí' o 'no' con la cabeza. No me permitió poner mi brazo. Nos quedamos sentade un rato. Le hablé que esta a salvo, que le voy a proteger y cuidar, que voy a respetar su cuerpo, sus límites, que no voy a hacer nada que no quiere. Le pregunté si le habían hecho daño, y me indicó un 'sí' con la cabeza. Le dije otra vez que esta a salvo, que le voy a proteger. Al final apoyó su cabeza en mi lado y empezó a llorar (y yo también). Cuando terminamos de llorar le dije otra vez que le voy a proteger, que nadie le va a hacer daño nunca más, que no lo voy a permitir, y que ahora era hora para dormir.

Esta noche dormí mejor, y por la mañana conecté otra vez brevemente con mi niñe interior, y le encontré como le había dejado unas horas antes.

Ayer por la noche también conecté brevemente con mi niñe interior. Le vi en su esquina, con vestido, cabeza entre las rodillas y llorando. Me senté a su lado y mi niñe me abrazó sin parar de llorar. Yo también lloré. Pero pronto encontré sueño – ya eran las dos de la mañana. Y dormí bien otra noche, sin despertarme varias veces.

Es la segunda vez que vi mi niñe interior en un vestido. ¿Qué me dice esto? No quiero decir que me sentía niña en mi infancia, pero me parece que sí había un tema de identidad de género, o de non-conformidad con las expectativas de género (masculino), y es algo que no me sorprende. Dudo mucho que jamás hablé con mis padres sobre esto en mi infancia, y dudo mucho que jamás me vestía en un vestido. Pero esto no significa que no me sentía incomode con lo que esperaban de mí como niño, que no me hubieran gustado otras cosas. Hasta que punto aquí hay otro trauma no lo sé...