Vivimos en un mundo violento. Sufrimos las consecuencias sociales y ambientales de un sistema económico capitalista basado en el crecimiento irresponsable. Sufrimos la ley mordaza, las reformas del código penal, las duras políticas de extranjería y fronteras, las respuestas de represión policial contra las protestas sociales… Estas formas de violencia, en el marco de una sociedad además, hetero-patriarcal y en plena crisis sistémica, nos hace desear el cambio hacia una Transición noviolenta.
Cada martes de Enero, a partir del día 12 y también la jornada del sábado 30, ponemos la mirada en la violencia que ejerce el sistema y las diferentes alternativas no violentas que existen como protesta o acción contra la desigualdad e injusticia social.