Ser no binarie, ser queer y abuso (sexual)

Aviso de contenido: tratamiento de abusos sexuales, físicos y psicológicos en la infancia.

"Sabemos que, independientemente de la orientación sexual, las personas que muestran un comportamiento de no conformidad de género (o genderqueer) en la infancia corren un riesgo mucho mayor de sufrir abusos sexuales. Una nueva investigación ha demostrado que les niñes que muestran un comportamiento no conforme con el género (a través de la vestimenta, los gestos y/o los intereses) antes de los 11 años (se sabe que son aproximadamente una de cada diez niñes), corren un mayor riesgo de sufrir abusos sexuales a los 17 años que sus compañeres conformes con el género. El riesgo de sufrir abusos sexuales es especialmente alarmante en el caso de los niños no conformes con su género, con tasas entre dos y seis veces superiores a las de los niños conformes con su género."

Amita Yalgin Swadhin

Cuando leí esto en un artículo de Amita Yalgin Swadhin en el libro Queering Sexual Violence, me emocionó mucho. Soy una persona genderqueer. Fui une niñe no conforme con el género, a quien se le asignó el sexo masculino. De niñe sufrí abusos sexuales. Mierda. ¡Mierda, mierda, mierda!

Aunque aquí no se sugiere una relación causal entre la no-conformidad con el género en la infancia y el abuso sexual, quería saber más. Así que busqué el artículo al que hace referencia Amita Yalgin Swadhin: Childhood Gender Nonconformity: A Risk Indicator for Childhood Abuse and Posttraumatic Stress in Youth. Una cosa más: TEPT. ¡Mierda! ¡Mierda, mierda, mierda! El artículo no es de fácil lectura cuando encajas en todos los criterios que mencionan en el título. Pero me atreví a leerlo.

El resumen de los resultados ya es revelador: "La exposición al abuso físico, psicológico y sexual en la infancia, y el probable TEPT fueron elevados en jóvenes en el decil superior de no-conformidad con el género en la infancia en comparación con jóvenes por debajo de la media de no-conformidad. ... La no conformidad de género predijo un mayor riesgo de TEPT probable a lo largo de la vida en jóvenes tras el ajuste por orientación sexual".

El lenguaje seco de una revista científica no puede ocultar la cruda situación. "En la infancia media, las diferencias de sexo se manifiestan en la elección de la ropa, las actividades, los gestos y los intereses de les niñes. Estas diferencias de sexo juntas constituyen la expresión de género, y a les niñes que no se ajustan a la expresión típica de su sexo biológico se les denomina "no-conformes con su género". La no conformidad con el género en la infancia se ha asociado a una serie de factores psicosociales estresantes, como una peor relación con los padres, el rechazo de sus iguales, el acoso y la victimización física y verbal. Posiblemente como consecuencia de la elevada exposición a factores estresantes, la no conformidad con el género en la infancia también se ha asociado a una menor sensación de bienestar en la adolescencia y a problemas de salud mental en la edad adulta, como síntomas de depresión y ansiedad, angustia, insatisfacción corporal, ansiedad por el apego y suicidio. Así pues, la no conformidad con el género en la infancia puede ser un importante indicador de riesgo para la salud".

¡Otra vez, mierda! ¡Mierda, mierda, mierda!

"El maltrato infantil aumenta el riesgo de trastorno de estrés postraumático (TEPT) directamente al desencadenar el TEPT e indirectamente al aumentar tanto la probabilidad de exposición a sucesos estresantes posteriores como el riesgo de desarrollar TEPT tras la exposición a un suceso estresante. Por lo tanto, si les niñes no conformes con su género tienen un mayor riesgo de sufrir abusos, también pueden tener un mayor riesgo de desarrollar TEPT en comparación con les niñes conformes con su género."

¡Mierda! Otra vez, ¡mierda, mierda, mierda!

Por lo que sé sobre el TEPT (complejo) creo que un factor importante es también la peor relación con los padres. Experimentar un suceso traumático no tiene por qué llevar a un TEPT de por vida si se tiene apoyo emocional en el periodo inmediatamente posterior. Sin embargo, si la relación con los padres es mala, esto es menos probable, y menos aún si los maltratadores son tus padres o uno de ellos: "Investigaciones anteriores describen posibles vías que vinculan la no conformidad con el género con el maltrato. Algunos padres pueden sentirse incómodos con la no conformidad con el género de sus hijes, lo que posiblemente aumente su probabilidad de ser abusivos con les niñes no conformes con su género. Los padres también pueden ver la no conformidad con el género como un indicador de orientación sexual hacia el mismo sexo o pensar que les demás asumirán que su hije será gay o lesbiana. Si los padres se sienten incómodos con la homosexualidad, la no conformidad puede hacer que le niñe sea objeto de malos tratos. Algunos padres también creen que su forma de criar a sus hijes puede influir en su no conformidad con su género y en su futura orientación sexual; por lo tanto, su forma de criar a sus hijes puede ser más abusiva física o psicológicamente en un intento de desalentar su no conformidad con su género o su orientación sexual hacia el mismo sexo. En términos de abuso sexual, les niñes que parecen ser diferentes de les niñes típiques corren un mayor riesgo de ser el blanco."

¡Mierda! ¡Mierda, mierda, mierda!

Sigo luchando por comprender cómo se relacionan mi identidad de género, mi asexualidad y el abuso sexual y de otro tipo que sufrí. Leyendo el debate anterior sobre la mala relación con los padres o el maltrato parental, recuerdo que un día mi psicóloga me preguntó cuándo fue la primera vez que me sentí queride por alguien... y me quedé en blanco. No tenía respuesta. Ciertamente nunca me sentí queride por mis padres, aunque no dudo que en cierto modo me quisieran, o, quizá más correctamente, quisieran su idea de mí, que no era yo. Nunca me sentí queride, nunca me sentí viste. Ni por mis padres, ni por ningúne profesore, ni por ningún otro adulto durante mi infancia o adolescencia, ni por ningúne compañere. Me viene a la mente el nombre de una chica cuando tenía 13 o 14 años, pero no recuerdo nada de nuestra amistad, sólo siento la pérdida.

Una vez más, ningún estudio ha podido establecer una relación causal simple entre la no conformidad con el género y unas peores relaciones con los padres. Un artículo - Testing causal models of the relationship between childhood gender atypical behaviour and parent-child relationship - concluye que la relación podría ser más bien recíproca, sin poder decir qué es primero, la no conformidad con el género o la mala relación padres-hije. No es útil...

Aunque en todos estos estudios la no conformidad con el género se considera de forma bastante amplia, y no se limita a niñes, adolescentes o adultes trans* o no-binaries (de hecho, ni siquiera se mencionan en estos estudios), encontré un estudio más específico: Disparities in Childhood Abuse Between Transgender and Cisgender Adolescents: "Les TGA (adolescentes transgénero) podrían tener un riesgo elevado de sufrir abusos durante la infancia debido a las experiencias distintas de esta población con la identidad de género y la expresión de género a lo largo del desarrollo. Les TGA se ajustan menos a las expectativas sociales de expresión de género durante la infancia, incluso antes de su identificación con una identidad de género que difiere de su sexo asignado al nacer. Les niñes con una identidad de género no conforme tienen más probabilidades de sufrir abusos en comparación con sus compañeres con una identidad de género conforme."

"Les TGA son más propenses a reportar abuso psicológico, físico y sexual durante la infancia en comparación con les CGA (adolescentes cisgénero) heterosexuales. Nuestros hallazgos se alinean con los de estudios anteriores que encontraron altas tasas de abuso en la infancia entre las personas transgénero. Cada vez hay más pruebas de que les TGA sufren problemas de salud mental en mayor medida que los CGA, y es probable que el maltrato en la infancia contribuya a la aparición de problemas de salud mental entre les TGA. En el futuro, les investigadores deberían examinar el papel del maltrato infantil en la etiología de los problemas de salud mental entre les TGA."

Una revisión de la investigación existente - Child abuse victimization among transgender and gender nonconforming people: A systematic review - llegó a las siguientes conclusiones: "A pesar de la variedad de métodos, estos estudios pintan un cuadro de abuso que está significativamente relacionado con la CGNC (no conformidad con el género en la infancia) y la condición transgénero. Los cuatro estudios que investigaron si la CGNC estaba o no asociada al maltrato infantil concluyeron que sí lo estaba. Dos estudios hallaron que cuanto mayor era la CGNC, más abusos sufría le niñe. Esta revisión tiene varias implicaciones para la investigación. En el nivel más directo, se necesita investigación que se centre en los tratamientos para el impacto del maltrato infantil en las personas transexuales. Existe una importante falta de bibliografía sobre enfoques de tratamiento concretos para este problema.

Además, se sabe muy poco sobre los riesgos y los factores de protección para este grupo de individuos. La aceptación de los padres es lo que protege le adolescente TGNC ( transgénero y no conforme con el género) en desarrollo del daño psicológico. ¿Cómo se fomenta este factor de protección en las familias y se promueve como una protección importante para esta población? Se necesita investigación para investigar intervenciones que disminuyan las tasas de abuso de personas transgénero y no conformes con el género y apoyen la aceptación familiar"

Otra vez, ¡mierda! ¡Mierda, mierda, mierda!

Pero quizás, al menos no me siento sole. Sólo que, ¿dónde están les demás supervivientes trans* y/o no binaries de abusos? ¿Por qué nadie habla?

Caroline Picker escribe en un artículo en el libro Queering Sexual Violence: "No estoy diciendo que todes debamos subirnos al escenario y hablar sobre ser queer y el abuso ante audiencias conservadoras, aunque admiro a cualquiera que lo haga. Lo que digo es que deberíamos contar nuestras historias, tan alto como podamos y tan a menudo como podamos. Digo que deberíamos reclamar el espacio que nadie nos va a conceder, para nuestra rabia y nuestro poder. La curación del abuso sexual infantil como individuos requiere una curación colectiva, requiere el fin del capitalismo, de la supremacía blanca, del heteropatriarcado, requiere movimientos radicales liderados por supervivientes. La autodeterminación y la justicia transformadora crecen cada vez que desafiamos a un mundo que quiere contar nuestras historias en lugar de nosotres."

¿Dónde estás TÚ? No te escucho. Contemos NUESTRAS historias...