Ubaté – Zipaquirá – Bogotá
El día 31 de agosto tuve el ultimo ascenso – en el trayecto desde Ubaté a Zipaquirá, hasta una altitud de 3084m. El inicio de la ruta es bastante fácil, pero a partir del pueblo de Sutatausa hay que subir hasta poco después de Tausa – mas o menos 10km para ascender desde 2600m hasta 3084m. No es demasiado duro, pero el trafico me molestaba por que en la ruta no hay ningún arcén, y a veces pasan camiones bastante largas (por suerte no muy rápidas por el ascenso).
Los últimos 2km del ascenso son bastante suave, y pasan por un pueblo minero (al menos parece como pueblo minero).
Luego sigue el descenso desde 3084m a mas o menos 2600m. Impresionante, y en este caso no tuve muchos problemas con el trafico. Los últimos 10km hasta Zipaquirá son bastante planos. Llegue poco antes del mediodía, y después de tomar un jugo natural busque e encontré un hotel (Hotel Colonial) económico (para esta zona).
Después de almorzar fui a visitar la Catedral de Sal, una catedral construida en una mina de sal (la mina todavía es operativa). La entrada es nada económico – 50000 COP (17€) - y antes de pagar me aseguré que el dinero va al municipio y no a la iglesia católica.
La catedral es un trabajo impresionante, al fin de un camino lleno de símbolos religiosos (representando la Viacrucis). Personalmente a mi me cuesta tolerar tanto simbolismo religioso (y no importa de que religión).
Al lado de la catedral, dentro de la mina, hay una serie de tiendas – ‘exit through the gift shop’. Era un poco horrible. No estoy seguro que realmente vale los 50000 COP (residentes de Colombia pagan 30000 COP).
El 1 de septiembre, después de desayunar, empecé el ultimo trayecto de mi viaje – los 50km hasta Bogotá. Esta parte no fue muy agradable. Casi desde el inicio la carretera era de doble calzada, por suerte en partes con un carril bici. No obstante, hubo partes – sobre todo los últimos 10-15km hasta llegar al limite de Bogotá – sin carril bici, y tuve que ir en la autopista, que durante los últimos 5-7km tampoco tenia arcén.
Llegando al limite de la ciudad de Bogotá había al menos un carril bici, pero en partes en muy mala condición. Al primero fui al centro de la ciudad – realmente mas lejos que tuve que ir para llegar a la casa de una amiga mía – pero no pude acceder a la Plaza Bolivar por un evento organizado por el partido político lanzado por la ex guerrilla de las FARC. Volví a la casa de la amiga y descansé.
Con esto ha terminado mi ruta en bicicleta por Colombia. Todavía me quedan unas días en Bogotá, pero ya no tengo que hacer ninguna ruta, y tengo mis dudas que voy a utilizar la bicicleta en la ciudad mucho… Me queda también organizar una caja para empaquetar la bici para el viaje de vuelta a Madrid.
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